La Alergia al Polen es uno de los problemas a los que se enfrenta una cuarta parte de la población, algo que es especialmente duro durante los meses de primavera. Según diversos estudios científicos llevados a cabo por alergólogos de todo el mundo, este porcentaje se incrementará en los próximos años. Los motivos son muy variados, pero suelen girar en torno a ciertos hábitos y a la falta de respuesta inmunológica derivada de éstos.
Motivos del Aumento de la Incidencia de la Alergia al Polen
Por ejemplo, el exceso de aire acondicionado no es bueno para nuestros pulmones, igual que tampoco lo es la costumbre de pasar mucho tiempo en un espacio cerrado porque nos acostumbramos a respirar aire artificial lo que aumenta la aparición de ácaros del polvo y del crecimiento de moho. Y si salimos al exterior, los elevados niveles de contaminación atmosférica tampoco ayudan. Todo ello, de una manera directa o indirecta, repercute en el desarrollo de una alergia al polen.
Causas del aumento de la Alergia al Polen
- Exceso de Aire Acondicionado
- Pasar mucho tiempo en espacios cerrados
- Respirar aire "artificial"
- Elevados niveles de Contaminación Atmosférica
Síntomas de la alergia al polen
Los Síntomas de la Alergia al Polen son muy variados. Se puede manifestar con estornudos frecuentes e incluso con tos. Además, es muy habitual el enrojecimiento y el picor de ojos. Pero también es común que a la persona alérgica le pique la garganta, la nariz o el paladar, o que note dificultad a la hora de respirar. Y la fatiga es otro de los síntomas que pueden llegar a darse en una persona con Alergia al Polen. En función del grado de alergia al polen que sufra el paciente, de la cantidad de alérgenos a los que esté expuesto en un momento determinado y de otros factores como las defensas que tenga, se podrán sufrir en mayor medida sus síntomas. Y se puede manifestar tanto uno un solo de estos síntomas como varios al mismo tiempo.

Síntomas de la Alergia al Polen
- Estornudos frecuentes
- Tos
- Picor de ojos.
- Iritación y enrojecimiento de los ojos
- Picor de Garganta, Nariz o Paladar
- Dificultad para respirar
- Fatiga
Consejos para Minimizar los Síntomas de la Alergia al Polen
Tras leer todo esto, quizá te estés preguntando si puedes Minimizar y Reducir los Síntomas de la Alergia al Polen. La respuesta es sí. Puedes llevar a cabo diversas acciones, todas las cuales repercutirán en mayor o menor medida a paliar sus efectos, pero cada una aportará su granito de arena.
Consejos para Reducir los Síntomas de la Alergia al Polen
Estos son algunos consejos que puedes poner en práctica para que la alergia al polen te afecte lo menos posible:
Evitar actividades al Aire Libre
Evita las salidas al campo o a las zonas ajardinadas, ya que los niveles de concentración de polen son superiores en estos lugares. Y dentro de lo posible, evita también cualquier actividad al aire libre.

Ventilar la Casa 5 minutos al día
No ventiles tu casa en exceso, basta con hacerlo 5 minutos al día. En ese breve periodo de tiempo puedes renovar todo el aire de una estancia y no darás tiempo para que entre mucho polen en el interior de tu vivienda.

Colocar Mosquiteras en las Ventanas
Puedes colocar unas mosquiteras en las ventanas de tu casa porque esto permite la circulación de aire, al tiempo que actúa como filtro y permite retener algunas partículas de polen. De esta manera, si tienes alergia al polen estarás un poco más tranquilo al tener una garantía adicional de que este alérgeno lo tendrá un poco más difícil para entrar en tu casa.
Cerrar las ventanillas al viajar en coche
Si viajas en coche, hazlo siempre con las ventanillas cerradas. Cuanto menor sea el contacto con el aire lleno de polen, tu sistema inmunitario reaccionará mejor.

Instalar un filtro anti-polen en el coche
Además, puedes adquirir un filtro anti polen para colocarlo en tu vehículo. Esto es muy práctico para un conductor que tenga alergia al polen, ya que así puede evitar estornudos y picores de ojos innecesarios, todo lo cual brinda una mayor seguridad al volante. Y también es algo de lo que se pueden beneficiar los pasajeros que también tengan alergia al polen, ya que el coche se convertirá en un entorno más limpio y seguro para todos.

No frotarse los ojos
Si te pican los ojos, no te los frotes bajo ningún concepto. Si haces esto, solamente conseguirás que te piquen más y que además se te enrojezcan. No obstante, puedes aclararte los ojos con un poco de agua porque si refrescas tus ojos, alivias el picor ocular.

Elegir el momento del día mejor para salir de casa según las condiciones meteorológicas
En algún momento tienes que salir de casa, pero si es posible, elige los mejores momentos para hacerlo. Si hace mucho sol y viento, es mejor que pospongas tu salida. En cambio, si el día está tranquilo o incluso si llueve un poco, es buen momento para salir porque los niveles de concentración de polen en la atmósfera serán menores. Y esto te ayudará a reducir los síntomas de la alergia al polen.
Elige la mejor hora para salir de casa
Al margen de la condición meteorológica, ten en cuenta el horario. A primera hora de la mañana es mal momento para salir al exterior porque los niveles de polinización son superiores. También se desaconseja que si tienes alergia al polen salgas a última hora de la tarde porque la atmósfera se enfría y aumentan los niveles de polen. Por tanto es mejor que un alérgico salga al exterior en cualquier momento del día o de la noche siempre que esté entre estos dos periodos de tiempo.
Consultar los niveles de cocentración de alérgenos en tu zona
De una manera más detallada, puedes consultar fuentes oficiales en las que se indica la concentración de diversos alérgenos en una zona determinada. La información se suele actualizar varias veces al día, por tanto es una gran referencia para que toda aquella persona que tenga alergia al polen organice mejor sus horarios y actividades en el exterior.

Cuidado con las labores del jardín
Si tienes un pequeño jardín en tu casa, no cortes el césped ni realices tareas de jardinería en los días ni las horas que hemos indicado porque los índices de concentración de polen en la atmósfera son superiores.
Evita fumar
El tabaco no ayuda a combatir los síntomas de la alergia al polen porque afecta al sistema respiratorio. Así que procura no fumar; esta puede ser una buena excusa para dejar el tabaco. Y tampoco te acerques a las personas que estén fumando, porque como fumador pasivo puedes sufrir también sus efectos nocivos. Lo ideal es que respires aire puro para dar una tregua a tu sistema inmunitario.
Utiliza un purificador de aire en casa y en el trabajo
Se recomienda comprar un purificador de aire para cada casa, e incluso en el trabajo, para así reducir la exposición al polen. Un purificador de aire es un dispositivo que filtra y limpia el aire que hay en una estancia, por tanto produce un aire más sano y puro para respirar. Además, los purificadores de aire también bloquean el paso de diversas partículas, como el polen. De ese modo, la persona que tenga alergia al polen también tendrá menos posibilidades de sufrir sus síntomas porque la calidad del aire le influirá positivamente.
Dúchate al llegar a casa
Cada vez que vuelvas a casa después de haber salido a la calle, dúchate para así eliminar de tu cuerpo y de tu pelo cualquier partícula de polen que se haya quedado impregnada. Si no es posible, al menos lávate bien las manos y la cara con agua y jabón. Una buena higiene es clave porque, de esta manera, no llevarás contigo el polen que afecta a tu propio organismo.
Lava la ropa al llegar a casa
Siguiendo la misma lógica anterior, también deberías echar a la lavar la ropa cada vez que vuelvas de la calle porque las partículas de polen pueden adherirse a los tejidos. Pero tranquilo, porque también hay un consejo alternativo, y es que sacudas bien la ropa. Pero hazlo en la ventana o antes de entrar en tu casa, porque sino todo lo que sacudas se quedará dentro de tu vivienda y no serviría de nada.
Evita tender la ropa en el exterior
Tampoco debes tender la ropa en el exterior. Quizá estés acostumbrado a hacerlo en tu terraza o en el patio de tu comunidad de vecinos para secarla mejor y evitar la humedad dentro de tu casa, pero ten en cuenta que en primavera aumenta el riesgo de exposición ya que las partículas de polen se pueden adherir a los tejidos limpios. Así que, lo ideal, es que tiendas la ropa dentro de tu casa y en un espacio cerrado, al menos durante la época de polinización mayor que es la primavera.
Lavar la fruta y verdura antes de comerla
Si vas a tomar una fruta o una verdura, se recomienda que la laves muy bien antes de comértela. Además, en el caso de algunas frutas que pueden tomarse con piel, es preferible pelarlas. El motivo es que el polen se adhiere con frecuencia a estos productos naturales, por tanto el riesgo de sufrir los síntomas de la alergia al polen puede aumentar ligeramente.

Consumir productos orgánicos como la miel
En la medida de lo posible, evita durante la primavera consumir algunos productos como la jalea real o la miel. Esto se debe a que son alimentos que producen las abejas y que, por tanto, podrían contener alguna traza de polen.
No tumbarse en la hierba en primavera
Si paseas cerca de un césped en un tarde soleada de primavera, no te tumbes sobre la hierba, resiste la tentación. Ya que si lo haces, estarás en medio de una zona que se puede considerar peligrosa para una persona con alergia al polen.
Sigue los tratamientos que te recete el alergólogo
Sigue a rajatabla el tratamiento que te recomiende tu médico alergólogo y, sobre todo, nunca te automediques. Si el médico especialista en alergias te ha sugerido un tratamiento de inmunoterapia, debes tomar o inyectarte las dosis en los plazos recomendados. Así que apúntate bien las fechas y que no se te olvide hacerlo ningún día; tampoco retrases la toma de las dosis, ya que debes amoldarte al momento establecido.
Toma antihistamínicos bajo consejo médico
Puedes tomar antihistamínicos, pero siempre bajo consejo médico y tras haber leído bien el prospecto para no sobrepasar la dosis recomendada. De esta manera puedes minimizar los efectos de la alergia al polen tanto antes como después de notar los primeros síntomas. Asimismo, no está de más que lleves contigo un antihistamínico cada vez que salgas a la calle por si tuvieras alguna emergencia y se manifestaran varios de los síntomas propios de la alergia; abultan muy poco y pueden salvarte de un apuro.
Hidrátate bien bebiendo mucha agua
Hidrátate bien porque esto ayuda a reducir los índices de mucosa y a abrir mejor las vías respiratorias. Puedes tomar mucha agua y zumos naturales, pero evita las bebidas alcohólicas porque su consumo provoca deshidratación en el cuerpo.
Utiliza Gafas de Sol
Las gafas de sol, o cualquier gafa, actúan a modo de escudo para que el polen no afecte directamente a los ojos. Esto se debe a que las lentes frenan su paso y su contacto directo, al menos de manera parcial. Por tanto, procura llevar unas gafas contigo para paliar ligeramente los efectos de la alergia al polen.
Viaja a la costa en primavera
En una zona costera, los niveles de concentración de polen son mucho menores que en una zona interior. Por tanto, y si puedes elegir, procura pasar todo el tiempo posible cerca del mar durante los meses de primavera. A veces puede ser complicado por cuestiones laborales, pero no descartes esta posibilidad para dar una tregua a tu sistema inmunitario algún fin de semana o en tus días libres. Al menos dale prioridad a este tipo de destino frente a una excursión a un río o a una montaña.
Evita los esfuerzos grandes cuando la concentración de polen sea mayor
Evita hacer esfuerzos físicos grandes, sobre todo en los momentos del día en los que la concentración de polen sea mayor. Si llevas tu cuerpo al límite estando en unas condiciones respiratorias complicadas, tu organismo tiene las de perder. Por tanto, si notas que tu cuerpo llega al límite, para y descansa. No merece la pena seguir la actividad física si te cuesta respirar, si estornudas constantemente y si te sientes más fatigado de lo normal.
Utiliza mascarillas en primavera
Puedes salir a la calle con una mascarilla para alérgicos. Ésta actúa como filtro de todo aquello que respiras, por tanto puede frenar el paso de agentes contaminantes, de virus... pero también del propio polen. De todos modos, el uso de mascarillas para reducir los síntomas del polen es una medida excesiva que solo deberías aplicar si padeces una alergia al polen grave o si vas a estar mucho tiempo en un entorno hostil para un alérgico.
Acude al médico alergólogo
Si tienes cualquier duda, consúltalo con tu médico o alergólogo, esta será la persona que mejor te puede ayudar con tu caso en concreto.

Lista de Consejos para minimizar los Síntomas de la Alergia al Polen
A modo de resumen, te recordamos los consejos y trucos para reducir los síntomas de la Alergia al Polen que puedes seguir en los momentos de mayor concentración. Así te afectará menos esta molestia alergia.
- Evitar actividades al Aire Libre
- Ventilar la Casa 5 minutos al día
- Colocar Mosquiteras en las Ventanas
- Cerrar las ventanillas al viajar en coche
- Instalar un filtro anti-polen en el coche
- No frotarse los ojos
- Elegir el momento del día mejor para salir de casa según las condiciones meteorológicas
- Elige la mejor hora para salir de casa
- Consultar los niveles de cocentración de alérgenos en tu zona
- Cuidado con las labores del jardín
- Evita fumar
- Utiliza un purificador de aire en casa y en el trabajo
- Dúchate al llegar a casa
- Lava la ropa al llegar a casa
- Evita tender la ropa en el exterior
- Lavar la fruta y verdura antes de comerla
- Consumir productos orgánicos como la miel
- No tumbarse en la hierba en primavera
- Sigue los tratamientos que te recete el alergólogo
- Toma antihistamínicos bajo consejo médico
- Hidrátate bien bebiendo mucha agua
- Utiliza Gafas de Sol
- Viaja a la costa en primavera
- Evita los esfuerzos grandes cuando la concentración de polen sea mayor
- Utiliza mascarillas en primavera
- Acude al médico alergólogo
Acude al Alergólogo
Ten en cuenta que estos consejos no evitarán que, si tienes alergia al polen, dejes de sufrir sus consecuencias, pero si los sigues puedes reducir parcialmente los síntomas de la alergia al polen. Y, si no estás seguro de si padeces o no esta alergia, lo mejor que puedes hacer es acudir a un alergólogo para salir de dudas. Éste te hará una serie de pruebas para confírmalo y te dará unas pautas, o incluso te indicará un tratamiento que deberás seguir, para llevar lo mejor posible la alergia al polen.